semanita

Fue fin de semana largo. Feliz dia del trabajador para todos. Aca llovio casi todo el tiempo, hizo mucho frio. Anduvimos un poco en la calle, Tomás se metio a los charcos muy feliz, aprendio a dormir sin baranda (padres muy orgullosos), hizo pis en la pelela, arrugo la nariz para decirme que se habia hecho caca, se cayo de la cama grande con gran estruendo pero no se desperto (eso no ese normal che!), trepó ochocientos tipos distintos de toboganes, volco agua por toda la casa, durmio conmigo, continuo su idilio con el padre, comio pera con brown sauce.

Yo me tome un dia completo para recuperarme del recital del jueves (ya no estoy para esos trotes), hice las compras pero no me llegaron hasta el lunes a la noche, no hubo comida en casa en todo el fin de semana, comimos en el pub, fuimos al oculista, me compre un vestido, jure comprar el diario cada mañana para enterarme mas de las elecciones y no lo hice, pusimos una red protectora sobre las lechugas a ver si le gano al gato ese por cansancio, los tomates se me murieron, las zanahorias le ponen huevo. Tuve nauseas. Estoy muy pero muy excitada con las elecciones del jueves. Elecciones generales señoras y señores, mis primeras elecciones generales en este pais. A mi votar me genera excitacion, aunque al dia siguiente suele generarme depresion. En Argentina una vez lo vote a Bravo.

Tambien tuve mi supervision anual y mi jefa esta chocha con mi desempeño. Que de las dos una lo esté no es poca cosa. Pero me deprime, es terrible no poder discernir entre si estas haciendo bien tu trabajo o si tu jefa te esta convirtiendo en una de su propia brigada. Me preocupa pero no tengo tiempo de hacer nada al respecto. Tambien esta semana volvi a ser periodista publicada despues de 9 años. De almuerzo sandwich de queso con crudities de zanahoria y morron amarillo. Hay que pagar el vestidito. Necesito un zapatero de confianza y si saben, tambien una modista.