Primero me llevó a buscar muérdago por el barrio. Esa fue la mejor parte porque pude charlar con unos gatos y le toqué el pupo al Buda de la vecina.

Después lavamos las ramas porque mi Mamá es un poco perseguida con los bichos. Yo en realidad lo vi al gato haciendo pis en el pino pero no dije nada.
Despues mi mama me sento a mirar como armaba el centro de mesa. Menos mal que me dio unas herramientas para jugar porque la verdad que fue bastante aburrido.
Está orgullosa mi Mamá de las pavadas que hace. Dice que terminadas no son tan fuleras. Para mí son un montón de yuyos.
1 comentario:
Jajajajajaja!!!! capísimaaa mamocha!!! re navideña y con toda la onda!!! me encanta que relate Tomás!!!estan hermosos los tres!!!
besotes! Marilin
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